sábado, 17 de diciembre de 2016

RESTAURANTES


Reformas y actualizaciones.


Hace unos días, el Hostal Restaurante Carmelo, tras unos meses cerrado por reformas, abre nuevamente sus puertas y nos presenta una nueva decoración y distribución en su local destinado a bar y restaurante.

Ha cambiado la ubicación de los servicios al espacio donde estaba la tienda de embutidos, chacinas y salazones, pasando el espacio anterior a formar parte de la cocina,  que aumenta sus  dimensiones.

La reforma abarca toda la planta baja, fundamentalmente en la distribución y funcionalidad de los nuevos espacios. Barra, cocina, comedor y bar, quedan bien delimitados por sus decoraciones que se basan principalmente en la luz, que genera ambientes diferenciados por el mobiliario y decoración, de un gusto exquisito, aunque sencillo y acogedor. 

La cocina, amplia, de una pulcritud envidiable, tiene ahora las dimensiones precisas para crear los platos más elaborados y propios de un restaurante de primera categoría y capaz de dar servicio al salón comedor así como a la barra, bar y terraza. Rapidez y calidad no están reñidas en estas nuevas instalaciones, donde el tiempo de espera entre platos está pensado para que no se pase el hambre y puedas comer al ritmo gástrico adecuado.

Si la nueva decoración es atractiva y muy funcional, la atención personal al cliente y comensal ha subido de calidad hasta el extremo de que pensarás que eres cliente exclusivo. Elegancia, profesionalidad y atención son señas de identidad.

La carta, para todos los gustos; pescados y mariscos, ensaladas y entrantes de chacinas, embutidos y jamón pata negra de bellota de producción propia, testado y demostrado de alta calidad. Y los platos estrella basados en las carnes del cerdo ibérico. A la plancha, en sus jugos o en guisos tradicionales.Todo al gusto del comensal y a unos precios justos y equilibrados.

Un lugar donde comer a gusto, sin prisas y donde el plato lo decides tu, con la máxima calidad a un precio justo. Y sobre todo, con la garantía de la mejor atención y limpieza. Y si te vas con buen sabor, puedes comprar sus productos ibéricos para invitar a la familia.

Os dejo algunas fotos de las nuevas instalaciones. No olvides, comer en Carmelo Hostal Restacurante de Santa Olalla del Cala, un verdadero placer para todos los sentidos.












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